“Suallera” hace alusión a la parte de la ladera de un barranco que se mantiene expuesta al sol. No en vano, en la Finca La Suallera, situada en La Galga (Puntallana), a unos 400 metros de altitud en un terreno amplio y escalonado, con diferentes huertos que se extienden por las laderas hasta el fondo del valle, el sol llega cada día, propiciando que puedan encontrarse frutas y hortalizas ecológicas de temporada, tradicionales de La Palma y también exóticas. Desde aguacates, papas, cebollas, acelgas, brócoli, lechugas, coles… hasta yacón, kakis o tamarillos. No faltan tampoco las frutas como las fresas o las nectarinas, ni las hierbas aromáticas y las flores, que son la alegría de la huerta durante todo el año. Así, encontramos en la finca los vivos colores y el dulce aroma de las caléndulas, capuchinas, heliotropos y lavandas.
Carlos Rodríguez Rodríguez (1971), propietario de La Suallera, trata con mimo y dedicación cada una de las plantaciones que, dependiendo la época del año, va cultivando. Su padre también fue agricultor y él realizó estudios agrarios en Tenerife, pero decidió apostar por su Isla a través de la diversidad ecológica y la biodiversidad, regresando a La Palma y dejando atrás el monocultivo y la agricultura convencional por la ecológica desde el año 2000.
Es consciente de que el sector agroecológico crece poco a poco pero con paso firme en la Isla, por ello está abierto a compartir con todos los interesados sus técnicas de cultivo para obtener productos ecológicos de calidad, así como dispuesto a aprender de otros agricultores con sus mismos intereses por lo ecológico. Con su dedicación y trabajo, Carlos ha conseguido que La Suallera se convierta en una finca rentable. Ahora tiene la posibilidad de dedicarse plenamente a ella, pero lo que realmente mueve a este agricultor palmero es su dedicación por el campo y su búsqueda de una agricultura más comprometida y saludable.
Consciente de los cuidados necesarios para obtener la mejor calidad de sus productos, Carlos trabaja con sus propios plantones y semillas. Además favorece la aparición de lombrices en la tierra a través de una serie de bañeras repartidas por toda la finca, en las cuales fabrica su propio humus con los restos del jardín y alimentos degradables. Esto aumenta la vida de microorganismos del suelo, aporta nutrientes, mejora la porosidad… Asimismo apuesta por la sustitución de los abonos químicos por los fabricados por él mismo en la finca de manera natural.
Es uno de los productores veteranos del Mercadillo del Agricultor de Puntallana. En todo este tiempo ha visto como cada vez son más las personas de la Isla valoran sus productos y buscan una mejor alimentación. Desde su apertura, la venta de sus productos la realiza cada sábado en su puesto ecológico del Mercadillo de su localidad en horario de 9:00 a 14:00 horas.
La Suallera está registrada como finca ecológica en el Registro de Operadores de Producción Ecológica de Canarias (ROPE), y con ella Carlos demuestra que en La Palma es posible la producción local sostenible, en la que primen los residuos cero, la calidad, lo natural y lo fresco. En consecuencia, anima con su ejemplo a que los agricultores isleños se adentren en la producción ecológica y a que los consumidores conozcan y valoren el producto local ecológico. Se trata de “agriculturear” La Palma.